Cirugía estética de los muslos lifting de la cara interna

Los muslos son a menudo sujetos a una pérdida de elasticidad de la piel. El envejecimiento, el embarazo, la pérdida significativa de peso son a menudo las causas de un exceso de grasa en la cara interna del muslo.

El Lifting crural es la intervención adecuada cuando la lipoaspiración por sí sola no es suficiente porque la flacidez de la piel es demasiado importante.

La piel que cuelga es una falta de armonía que a veces puede ser incómoda, acomplejar y volver el vestirse difícil.
Esto puede afectar tanto el aspecto físico como psicológico.

La intervención de un lifting crural tiene como objetivo reducir la infiltración excesiva de grasa, realizar la eliminación del exceso de piel, y reajustar la piel para obtener un resultado más armonioso y una silueta más fina.

La lipoaspiración no se practica sistemáticamente, sólo si hay una infiltración de grasa.
Luego, el exceso de piel es removido, el cirujano realiza entonces una fijación en profundidad en la parte superior de la cara interna del muslo (ligamento aponevrótico).

Esta fijación permite mantener la corrección de la flacidez cutánea y evitar que la cicatriz vuelva a bajar.

Se reajusta el conjunto con suturas más o menos importantes, dependiendo del estado de flacidez de la piel.

Al final de la intervención, se coloca un vendaje de compresión.

+ ¿Cuál es el tipo de anestesia?

Dependiendo del caso, la anestesia puede ser local, profundizada con tranquilizantes por vía intravenosa o general.

Este tema será el motivo de una plática entre usted y su cirujano durante una consulta.

+ ¿Y la cicatriz?

La cicatriz queda escondida en un pliegue natural y de esa manera resulta bastante discreta.

Hay dos tipos de cicatrices:

• La más frecuente es horizontal: sigue el pliegue que separa la parte interna del muslo de los órganos genitales,
• Más raramente es en forma de T: asociada a la cicatriz horizontal, una segunda vertical se encuentra en la cara interna del muslo.

+ ¿Cuál es la duración de la intervención?

Generalmente varía de 1 a 2 horas, pero depende de la importancia de la intervención.

La hospitalización dura de 1 a 2 días.

El postoperatorio es poco doloroso, limitado a la tirantez cutánea y disminuido gracias a un tratamiento analgésico.

Moretones y un edema (hinchazón) aparecen en el área tratada, pero desaparen gradualmente.

Se le puede prescribir una suspensión de trabajo según su actividad profesional.

El deporte y los esfuerzos importantes se le desaconsejan durante las primeras 6 semanas, correspondientes al primer período de cicatrización.

La cicatriz, a menudo rosada los primeros 3 meses, se desvanece progresivamente a lo largo de 1 o 2 años. Esta evolución depende sólo de la facultad de cicatrización del paciente.

Es conveniente no exponer las áreas tratadas a los rayos ultravioleta durante por lo menos 4 meses, para evitar la pigmentación de la piel.

El efecto estético se puede notar de 6 a 12 meses después de la intervención, acompañado de un beneficio real, físico y psicológico; su silueta tiene nuevas curvas, una nueva armonía.

Con la experiencia y el progreso técnico, los resultados de esta intervención han mejorado notablemente en los últimos años.

A raíz de una operación, cualquiera que sea, pueden surgir ciertas complicaciones, algunas relacionadas con la parte medica y las otras con la anestesia.

Aunque las eventuales complicaciones sólo representan un pequeño porcentaje, es necesario conocerlas.

+ ¿Cuáles son los riesgos propios a la anestesia?

Durante la entrevista obligatoria con el anestesiólogo, él le informará en detalle de los riesgos de la anestesia.

Es útil saber, por otra parte, que en los últimos veinte años, los riesgos no se eliminaron, pero han sido casi insignificantes.

+ ¿Cuáles son los riesgos propios a la intervención?

Durante las consultas con su cirujano se le detallarán todas las complicaciones posibles.

Para informarle de antemano, aquí están los posibles riesgos:

• Una imperfección del resultado que podría causar retoques.
• Una necrosis de la piel (muy favorecida por el tabaquismo y la obesidad) es a menudo limitada, rara vez importante.
• Una infección prevenida por una higiene pre y post operatoria estricta hasta la cicatrización completa, puede requerir de un drenaje o de un tratamiento con antibióticos.
• Hematoma y sangrado pueden a veces ser observados y pueden requerir una evacuación o una punción con el fin de no alterar el resultado.
• Una modificación en la sensibilidad en el área superior de la parte interna del muslo es común y desaparece en un periodo de 3 a 6 meses.
• Accidentes trombo-embólicos (flebitis, embolia pulmonar), la complicación la más grave, son excepcionales y se toman precauciones para reducir el riesgo.